
Letra
Con el tiempo como aliado, con la sombra en la mirada
Soy un náufrago varado en un desierto de palabras
Hubo un tiempo que hube amado y ahora ya no siento nada
Como un árbol congelado en un invierno ya sin alma
De ese amor ya marchitado como rosas olvidadas
Son los sueños del pasado que se esfuman en la nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Cada estrella que seguía por el cielo se ha apagado
Cada espina que dolía con los dientes se ha arrancado
Nada dura cuatro días, ni el dolor ni el constipado
La llorera que tenía cuatro noches me ha durado
De ese amor ya marchitado como rosas olvidadas
Son los sueños del pasado que se esfuman en la nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Ningún verso puede hacer que salga el sol de madrugada
Ni que te vuelva yo a querer cuando ya no quiero nada
Notas del autor
Hay amores que no terminan con un portazo, sino con un suspiro, sin culpa, sin rabia, solo cansancio y aceptación. Quedan recuerdos secos, gestos que ya no emocionan, estrellas que ya no guían. Como un ramo de rosas olvidado, que se marchita no por falta de amor, sino por ausencia de cuidado. Esta canción es una despedida sin drama: solo el eco de lo que fue y ya no puede ser.
🎭 Cierra el primer acto. Aquí el amor muere, sin ira ni reproche —solo verdad.